Las bombas centrífugas se utilizan en el movimiento de aguas residuales de todo tipo, tanto en estaciones depuradoras y de tratamiento de aguas residuales urbanas, como en el tratamiento de aguas residuales industriales; así como bombas para uso doméstico. Evidentemente, cada sistema requerirá de una bomba (o bombas específicas) según la aplicación.
El tratamiento y gestión adecuada de las aguas residuales de una población está estrechamente relacionado con la seguridad y sanidad públicas, por tanto, requieren de sistemas robustos y eficaces de bombas centrífugas. Igualmente resultan especialmente importantes los sistemas de control y la automatización de la gestión de los distintos procesos.
Para un trabajo eficiente de la instalación tanto el diseño del proyecto como los procedimientos de mantenimiento y los sistemas de control requieren del trabajo especializado de ingenieros y técnicos cualificados. Una correcta planificación y diseño del sistema de bombas es fundamental para el óptimo rendimiento de la estación depuradora. Por ello tanto la puesta en marcha como cualquier modificación de las bombas o la red de estaciones de bombeo debe ser realizada por una empresa solvente y con amplia experiencia en sector.
Existe una gran diversidad de posibilidades en cuanto a: el diseño de la instalación de las bombas; los tipos de bombas; su mecánica (impulsores y motores); los materiales de fabricación; necesidades de mantenimiento, etc. Los tres aspectos más importantes a tener en cuenta a la hora de elegir una bomba para aguas residuales son:
- Minimizar la posibilidad de obturación y atasco de la bomba.
- Bombas centrífugas con baja necesidad de mantenimiento que permitan un trabajo en continuo.
- Fiabilidad y robustez.
- Alto rendimiento y eficiencia energética.
- Por supuesto, utilizar la bomba adecuada para cada aplicación: bombas para aguas residuales municipales, bombas para tratamiento de aguas residuales industriales, etc.
Bombas para aguas residuales domésticas
Las bombas sumergibles para aguas residuales domésticas son muy utilizadas para desalojar agua de piscinas, depósitos de agua, uso en pequeñas inundaciones de cocheras y otro tipo de drenajes. En el mercado contamos con distintos tipos de electrobombas según si su uso va a ser esporádico o más continuado; así como la capacidad de desalojo (caudal) que necesitemos. Al igual que en los casos anteriores la capacidad de obstruirse, la eficiencia y la robustez son aspectos que debemos valorar a la hora de comprar una electrobomba.
Los trabajos con aguas residuales requieren de bombas centrífugas adecuadas para la realización de los movimientos y tratamientos especializados que requieren estas aguas. Nuestra recomendación es siempre que os dejéis asesorar por profesionales sobre el sistema y tipo de bomba más adecuado para cada utilidad.
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